By Randy Manuel Jiménez Javier

Hace nueve meses atrás, cuando yo llegué por primera vez a este país, no sabía nada de inglés. En la escuela todas mis clases eran en inglés y yo me quedaba como perdido en un mundo totalmente diferente. Pero después, con el tiempo, entendí que ese era un método de aprendizaje que tienen en mi escuela para que nos relacionemos con el idioma debido a que estoy en una escuela bilingüe. Gracias a eso, he aprendido muchas cosas las cuales no sabía ni siquiera pronunciar. Desafortunadamente, esa no es la experiencia de miles de estudiantes que emigran de otros países a los Estados Unidos. En cambio, yo tuve la oportunidad de interactuar con estudiantes que también hablan español como primer idioma.

El mayor problema en Boston es que no hay suficientes programas de ayudas para los inmigrantes recién llegados, lo que ocasiona algunos efectos que son muy notorios en la sociedad. La causa más probable de esta falta de ayudas es que no hay suficientes recursos financieros para mantener los programas y que no hay suficientes maestros preparados en la educación bilingüe. Esto causa que muchos de estos estudiantes recién llegados al país se sientan aislados de los demás estudiantes qué van a otras escuelas, tal vez con más prestigio, que a la que ellos asisten. El fin es que todas las escuelas sean unánimes en esa decisión y que tomen en cuenta lo importante que es tener escuelas para inmigrantes recién llegados al estado. De esta manera se puede evitar que dejen los estudios, asegurar que aprendan inglés y también evitar que se sientan aislados o que pierdan la oportunidad de seguir hacia adelante.